Presión de ganador

Recta final de temporada. Llega la hora de la verdad. Cuando el piloto tiene que demostrar que está arriba y que sabrá mantenerse. Y no es tarea fácil... solo hay que fijarse en Jenson Button. El inglés es el líder de la Fórmula 1, pero lucha contra un factor muy importante: la presión. A parte, tiene el rival en casa. Su compañero de equipo, Rubens Barrichello, es el único que le puede hacer sombra. Por lo tanto, el equipo Brawn GP tiene que medir cada decisión, cada movimiento... todo va a ser mirado con lupa.

Button solo depende de si mismo. Pero llega el momento de la temporada donde ya no se puede fallar. Si quiere ser campeón, tendrá que comportarse como uno. Tendrá que saber gestionar la presión, demostrarnos a todos que puede hacerse con el título. Y para empezar, tendrá que clasificarse mejor que en Singapur. Sí que es verdad que al final acabó por delante de Barrichello, pero tendrá que mejorar. Tenemos que tener en cuenta que es la primera vez que lucha por el título de una forma tan clara; es una situación completamente nueva para él.

Y lo más difícil será mantener la cabeza fría. Las carreras que quedan se le van a hacer muy largas. Sabe que no puede cometer fallos si no quiere perder todas las opciones. Y nervioso, lo está. Seguro. Pero tendrá que sobreponerse a esa presión del ganador. Olvidarse de los demás, de los rivales, de la prensa, siempre tan agresiva. Es él contra él mismo. Algo que se puede convertir en una pesadilla.

Pero en el equipo Brawn tampoco lo tienen fácil. Los dos pilotos optan al título, así que tendrán que ser totalmente parciales, darles a los dos el mismo trato. Nada de favoritismos. A principios de temporada ya vivimos un episodio donde Barrichello creía que favorecían más al inglés... los dos van a ser muy egoístas. Y gestionarlo va a ser muy difícil...

Button contra Button. Nervios, tensión... Me pregunto si sabrá gestionarlo todo como debe hacer un campeón. Tengo dudas, y creo que no hay nada sentenciado. 3 carreras, 30 puntos en juego, y Button dispone de 15 puntos de ventaja. Parece bastante, pero a la que cometa un error, ese cojín le parecerá demasiado poco, y aparecerán los nervios, la incertidumbre. Y aquí es donde Barrichello se puede aprovechar. Tiene experiencia, y nada que perder. Ganará el que sepa gestionar mejor la presión del ganador.