Tierra de motivaciones

Y llegamos al gran premio que marca el ecuador de la temporada, a Nürburgring. Estamos ante la cita alemana, una prueba que puede servir de mucho a los pilotos alemanes. La motivación es un factor que se puede convertir en algo muy importante. Es como cuando un equipo de futbol juega fuera o juega en casa. La cosa cambia, y mucho. Pues aquí igual. Correr en casa, rodeado de tu gente, hace crecer al piloto.

Cinco pilotos corren en casa: Vettel, Rosberg, Heidfeld, Sutil y Glock. Y el que llega mejor posicionado es el baby Schumi. Es el único que parece conocer el secreto para ser más rápido que el actual líder, Jenson Button. Y corriendo en casa, sabe que no debe decepcionar. Si gana, se convertirá en el primer piloto alemán que no se apellide Schumacher en ganar un gran premio alemán. Casi nada...

Pero lo más importante es quedar por delante de Button. El inglés aún dispone de bastantes puntos de ventaja, pero no se puede dormir. El equipo Red Bull se está mostrando competitivo y además cuenta con un joven alemán que va a por todas.

Nürburgring es un circuito legendario, y aunque ya no se corra por el trazado original, sigue conservando su magia. Es un circuito moderno, con diversos puntos donde adelantar y donde es necesaria una buena aerodinámica. Pero se trata de un circuito donde el tiempo es imprevisible. Ya lo vimos la última vez que se corrió aquí: diluvió tanto que se tuvo que sacar la bandera roja. Vettel se debe estar frotando las manos. La lluvia le va de maravilla. Y más si es delante de su gente... ¿qué más puede pedir?